QUE ESPERAR EN TU PRÓXIMA PRIMERA CITA PARTE 2

¿ESTAS HECHA UNA REINA Y SOLO TE FALTA LA ALFOMBRA ROJA? PREPARATE PEBETA!

Tocó el timbre y parecés una quinceañera sin estreñimiento. Te tiemblan las patitas cuando estas bajando por el elevador esperando ver su cara, y su auto.
Si es muy pomposo no te convendrá, por más buena que estés nunca podrás correr a 230 kms a la hora ni hacerlo sentir la mitad de la adrenalina que le recorre el cuerpo al tomar una curva cerrada sin mosquearse. No intentes competir contra su auto. El pene del hombre es su auto y viceversa, adora su auto y lo tendrás al borde de correrse ahí mismo. Si es muy Banana de seguro te hará algún comentario sobre el precio de concesionaria, lo que gastó en el último service y lo que cuesta conseguir un lugar donde estacionarse sin que se lo rayen. Un pelmazo machista que solo vino a enchastrar su malograda " fortuna" por tu cara.
Si viene en una carchacha, pobre! Y Pobre tu suerte! Preparate para empujar más que remarla.
Hay batatas y batatas. Yo en lo personal manejo una que se parece a un pan de molde y en mas de una oportunidad no he llegado a abrirle la puerta que se han ido para el otro lado. Así que cuidado, no seas condescendiente con ese cajón de verdulero con cuatro ruedas al que llama " un clásico". Saca un turno para vacunarte contra el botulismo y el tétanos al dia siguiente.
LLEGAMOS AL RESTÓ: Y vos te lo imaginabas a orillas del rio, con luciernagas coreanas entrenadas escribiendo sus nombres entrelazados y una tenue música de piano de fondo.
Pero a él le gustan las cantinas. Tus zapatos van quitando parte de la viruta roñosa del piso mientras intentas quitarle elegancia a tu andar por entre las mesas de este aguantadero napolitano que, estará muy de moda, pero sigue siendo la misma cadornada que hace 50 años cerraba el organismo de salubridad pública en los barrios bajos de inmigrantes por mugrientos!
Tomás una buena bocanada de vino para darte valor y se lanzan a comer y charlar. El presente, los sueños, el pasado, la gente que estuvo, los quilombos que fueron dejando, que uno es fóbico de esto o aquello y que el otro está buscando una relación free, en fin. Todo el chichoneo verbal que antecede al Hotel de Paso. Puede ser su casa ( y corrés el riesgo de que te raje a las 4) o puede ser tu casa ( y el riesgo es que se te instale y tengas que sacarlo con un doberman prestado). Por lo que se recomienda un telo de mala muerte lleno de pulgas y sudor ajeno. Eso es puro romanticismo a 25 pesos la hora.
En fin, se dan unos besos y el te mira con los ojos de John Wayne al decirte " ¿Vamos?" Y vos que vá. Ya estas en el baile, te depilaste, te compraste ropa. Ya fué- te decís-, ya armamos el arbolito, esperemos que sea noche buena!
Y sin recordar cómo estás en pocos segundos batallando para que el sujetador del corpiño no termine arrancado de una bajo las mordazas de foca que tiene por manos tu cita.
Y acá la enfermita de EUROFEM no se contenta con un simple machito. La demente desea un orangután de manos suaves, implacable, insaciable, inmune al estress, a la vida de ciudad. Quiere un marinero que no haya tocado tierra en meses y que la haga suya para siempre, que haga valer cada tirón de cera de esas piernas que están a punto de ser accedidas por esa máquina impérrita de deseo y lujuria y ser doblegada contra las sábanas mientras se aferra a él como de su vida.
Pero no, a él no se le para. O se le para de a ratos y además es un completo inútil con el resto del cuerpo que supuestamente le funciona.
No solo no besa bien sino que aprieta demasiado fuerte donde no debe y es demasiado suave donde si hay para agarrarse. La idea está, pero parece que el instructivo le vino al revés.
Puede que ocurra lo contrario, que le agarre un ataque de fornicación que le dure 25 segundos, te mire luego satisfecho con cara de " te mate guacha!" o que se eche a dormir la mona.
De cualquier manera el hombre ideal en la cama no existe, y menos en la primera cita.
Vuelven a tu casa ( si es que ha tenido el decoro de llevarte), te deja con un beso amable prometiendo volver a llamarte.
Ahh hombres.... Si tan solo vinieran con sabor a helado....
Espero que el próximo sea diferente.

Colton & Vegas.